CAMINO Y AMO SIN SABER QUE AMO

No me podréis comprar en la avenida
Como se compra armario desclavado.
Busco en el bien de alma lo más amado
más allá de la muerte y de la vida.

Todo tiene en mi muerte presentida
un sabor a amargura y bien guardado;
es cuando ando y remiro hacia aquel lado
de sombra negra colgada, invertida.

Invertida parece como muerte
que de adentro me llama y me reclama.
Así de terca es su ala repetida.

Me veo y toco como ser inerte
que respirando ama sin saber que ama.
¡Santo Dios de la muerte y de la vida!