ALEJANDRO COLLANTES DE TERÁN
Alejandro Collantes de Terán  , Poetas Andaluces en www.poetasandaluces.com

BIOGRAFÍA

ALEJANDRO COLLANTES DE TERÁN DELORME nació en Sevilla en 1901 y perteneció a la Generación del 27.

Hijo del latinista Antonio Collantes de Terán, estudió filosofía y letras en su ciudad natal, donde contó entre sus profesores a Pedro Salinas. También empezó la carrera de Derecho, que dejó inconclusa. Fue redactor jefe de la Revista Universidad (1919), en la que empleó diversos seudónimos (Alexandre, Adolfo Centauro, Mauricio de Torre-Sacra, Julio de Abril, El poeta Juan N. Tirado, El poeta Bernardo, David Augusto de Bal, Javier Arenal y Henario Bon).

Sus inicios poéticos fueron a la sombra de los versos de Bécquer, aunque de formación modernista y novecentista ironizó sobre las vanguardias en el artículo "Los camelistas, neocamelistas y otras yerbas" de otra revista de la que fue director, Juventud, en 1921. Sin embargo fue el administrador y principal motor impulsor de una de las grandes revistas poéticas del 27, la sevillana Mediodía, a la que inventó un mecenas ("el señor Arceniaga") que le servía para rechazar ciertos originales no solicitados.

En vida sólo publicó novelas cortas, libros de temática local (era un gran aficionado a las antigüedades y era funcionario del ayuntamiento de Sevilla) y un delgado y estimable volumen de versos de corte neopopularista, "Versos" (Sevilla, Mediodía, 1926), donde a precia la influencia de Fernando Villalón y Federico García Lorca. Como periodista colaboró asiduamente en El Noticiero Sevillano, ABC de Sevilla y El Correo de Andalucía. En este último usó el seudónimo Gongorilla.

En 1930 se casó con la hermana del pintor Pablo Sebastián, María Teresa Sebastián. En 1932 publicó un pliego titulado "Nochebuena (Canciones populares)" que él mismo ilustró. Fue incluido en la "Antología de poesía andaluza" de Arauz (1936) y salieron póstumos "La correduría de Sevilla" (Sevilla, 1946) y "Poesías" (Sevilla, 1949).

Miembro fundador de la reorganización de la Hermandad de las Penas de San Vicente en 1924, perteneció a la primera Junta de Gobierno de la Hermandad como Secretario.

A pesar de su corta existencia, dejó una huella profunda tanto en sus compañeros y amigos como en la vida literaria de la Sevilla del momento. El tema central de sus versos fue casi siempre Sevilla, lo que ha provocado que gran parte de la crítica le acusara de localista. Sus versos son conmovedores, intimistas y llenos de gracia.

Murió en Sevilla en 1933.