DÍAS GRISES
Habrán de ser distancia, eco lejano
que suspende en los hilos del ocaso,
cada flor, cada sutil cosquilleo
cada brillo de amor, una mirada
sin corresponder, casas solitarias
y unas calles sin nombre ni cartones.
Serán engaños de la soledad
del hombre, de la misma incomunicación,
de esa turbia marea,
que borra las señales en la orilla,
y del tiempo que borran los relojes.
Ahora, hechos de viento y nubes bajas,
se alojan en desvanes y rincones.
Son cuadros carcomidos, erosión
del relieve, icebergs desmoronados.

Habrán de ser distancia aquellos brillos.


DÍAS GRISES (Washington: Latin Heritage Foundation, 2011)