Es Carmelilla la cigarrera una mosita como no hay dos, es morenita y es trianera y tié en su cuerpo la gracia e Dios. Los señoritos van a Triana a ve cual de ellos la pué lograr, pero con oro nadie la gana porque es gitana de caliá; tan sólo un mosito que bien la camela cantando bajito le dice a Carmela: Te quiero, porque tienes los ojitos lo mismito que luceros, te quiero, que me sabes a canela y me hueles a romero. Carmela mía, qué guapa eres, la más bonita de las mujeres; tú te ríes de los hombres y desprecias el dinero y por eso yo te quiero. Igual que Carmen la cigarrera ya Carmelilla famosa es porque en las plazas de España entera se aplaude el arte de su Manuel. El chavalillo que la quería sus ambiciones ya consiguió y es el torero de más valía que en la Maestranza se consagró. Y anoche en Santa Ana los dos se han casao y así a su gitana Manuel le ha cantao: Te quiero, porque tienes los sacais lo mismito que luceros, te quiero, que me sabes a canela y me hueles a romero. Carmela mía, qué guapa eres, la más bonita de las mujeres; tú te ríes de los hombres y desprecias el dinero y por eso yo te quiero.