Ese chico “grandullón”
que de siempre será el niño
¿cómo lo diría yo?
con las veces que le riño
y soporta el “chaparrón”,
¡ vaya niño ¡

El que siendo tan chiquito
quería ser tamborero
ese noble tan rubito
que tenía tal salero
dentro del corazoncito
sevillano y cofradiero...

¿Y yo qué puedo decirte?
¡que te quiero “mogollón”!
 y tanto como sufriste
 “pa” cumplir esa ilusión
 y al final lo conseguiste:
¡estudiar como el mejor!

Estadista o deportista
el reto queda pendiente
en la carrera prevista
y que seas elocuente
que no te falle la “vista”...
tenlo siempre presente.

Y ya dejo los consejos
que disfrutes del momento
que hace nada estabas lejos
de conseguir el portento.
Y con esto ya te dejo
enviándote mi “aliento”.

Y mi pequeño homenaje
porque me siento orgulloso
de alguien que con coraje
se vuelve maravilloso
porque lleva ese linaje
de su madre, que es un gozo.

Ya tan solo decirte
que siempre seré tu amigo
y ayudar a decidirte
como siempre yo te digo
no dejes de divertirte.
Y el deber como “castigo”.


Felicidades hijo mío. Te quiero. Sevilla, Octubre 08