EL BERMELLÓN A MANCHAS SE MOSTRABA (Sonetos)
El bermellón a manchas se mostraba
en el pardo, y azul con vario adorno
del blanco y jalde realzado en torno
sobre Titán, que ya su ardor negaba.

La negra noche a más andar se entraba
del claro día escuro desadorno,
cuando los ojos a una parte tomo
de un alto bien dudoso, que esperaba.

¡Gloria del mundo! digo, y luego veo
de gloria el suelo, calle, y mi alma llenas
de una luz, que salió, que a Febo alcanza.

Alégrate de hoy más, dijo, Liseo,
que quien también amó sufriendo penas,
sabrá estimar el bien de la esperanza.