NADA DE NADA
He vivido muchas vidas.
He andado muchos caminos
por tierras desconocidas
buscando nuevos destinos.
Me gustó mirar los cielos
con alegre azul teñidos,
y de obscuros nubarrones
llorosos, y deprimidos.
Pasé del momento triste
al jocoso y divertido,
y vi que la vida embiste
sin tener mucho sentido.
Y quise ser hortelano.
Cuidé mi jardín com mimo.
Hasta que fue devorado
por las yerbas del vecino.
Cerré con llave su puerta
y una tranca su postigo.
Yo, ahora controlo mi huerta,
y soy guardian y testigo.