TINIEBLAS
Legiones de pavanas,
carroñeras y hambrientas.
Marfiles en los dientes,
reliquias, huesos, hierros,
y peces, moribundos:
oro rancio es la envidia.
Temblores de baja tierra,
algas salvajes, flotan sobre el mar.
Delfines en el Estrecho,
entre pateras perdidas en la niebla.
El sol, desplaza, temblando,
a miles de nubes grises.
Y al llegar sus cuchillos,
se va rompiendo el invierno.