Horas alegres que pasáis volando porque a vueltas del bien mayor mal sienta; sabrosa noche que en tan dulce afrenta el triste despedir me vas mostrando; importuno reloj que, apresurando tu curso, mi dolor me representa; estrellas con quien nunca tuve cuenta, que mi partida vais acelerando; gallo que mi pesar has denunciado, lucero que mi luz va oscureciendo, y tú, mal sosegada y moza Aurora, si en voz cabe dolor de mi cuidado, id poco a poco el paso deteniendo, si no puede ser más, siquiera una hora.