(Poema denuncia)
Hay en Córdoba una calle ignorada y olvidada, “La Calle de los Arquillos” que su leyenda la marca. Lindando con “Las Cabezas” tiene en la esquina una casa donde vivió sentenciado El Caballero de Salas. Siete hijos que tenía … ¡Pobres infantes de Lara!, muertos en campos de Soria con degüello en las gargantas. Descrita por cordobeses la historia que nos relatan, se recoge en una placa que te muestra su fachada. Son: Don Ambrosio Morales y Aben Hayan, que habitaban allá por el mil quinientos cuando tenían ya fama. También lo cuenta un cantar de La Gesta Castellana, y está en los libros de historia, ¡y está en los libros de armas!, más con todo esto escrito del caballero y la trama con hijos ajusticiados, -no existe mayor desgracia-, decapitan sus cabezas para en la calle colgarlas... ¡Pues todo esto escrito! … Se nos derrumba la casa. Hace ya más de mil años que esta historia se cantaba: En Calle de los Arquillos las cabezas son colgadas, y el padre sufre en silencio viéndolas desde su casa” Mientras mimamos las piedras en mi Córdoba Sultana, la calle llora su olvido… ¡Y a nadie le importa nada!